Cada vez más clientes deciden tomar la comida de su restaurante o bar favorito en casa y, por ello, es necesario que los establecimientos estén equipados con los envases necesarios para ofrecer este servicio.
La amplia gama de envases take-away existente hace difícil elegir cuál es la mejor opción para tu negocio. Desde Zambú, queremos ayudarte en esta tarea y, por ello, en este post te damos las claves en las que debes fijarte a la hora de elegir qué envases utilizar en tu local. ¡No te lo pierdas!
¿En qué debes fijarte a la hora de elegir un envase take-away?
Al elegir un envase take away para tu negocio, debes prestar atención a varios factores clave para garantizar la satisfacción del cliente y la eficiencia operativa:
- La funcionalidad: el envase debe ser adecuado para el tipo de alimento que va a almacenar (caliente, frío, líquido, sólido, etc.). También hay que considerar la resistencia a fugas y derrames y la facilidad de apertura y cierre para el cliente.
- Materiales empleados: debes asegurarte de que los materiales son seguros para transportar alimentos. Además, que sean respetuosos con el medioambiente siempre será un plus.
- Coste: otro factor clave es el ajuste al presupuesto disponible, sin comprometer la calidad o funcionalidad.
- Ergonomía y comodidad: el envase debe ser fácil de transportar, con un peso ligero y un diseño que facilite el agarre.
- Regulaciones y normativas: es fundamental que trabajes con un proveedor experto que garantice el cumplimiento de las regulaciones en cuanto a seguridad alimentaria y materiales de envasado.
Tener en cuenta estos cinco puntos te será de gran ayuda para decantarte por un tipo de envase u otro. A continuación, te presentamos los materiales más utilizados en los envases take-away y en qué casos conviene utilizar cada uno.
Los mejores materiales para tus envases para llevar
Recipientes de aluminio
Son una de las opciones más comunes en el take-away. Estos envases están especialmente recomendados para almacenar platos calientes, como sopas, guisos o platos principales; ya que permiten mantener la comida caliente durante más tiempo. Esto se debe a que el aluminio tiene una gran conductividad térmica, por lo que mantiene la temperatura.
Además, se trata de un material resistente a la corrosión y a la oxidación, ideal para alimentos ácidos como salsas de tomate.
Recipientes de plástico
Los envases de plástico son una opción duradera y resistente para los platos para llevar. Una de las ventajas de utilizar envases de este material es que es muy difícil que se deformen y, además, son transparentes, lo que permite una presentación más llamativa.
A esto hay que añadir que se pueden utilizar varias veces y reciclar, por lo que el cliente podrá alargar su vida útil y contribuir a la protección del medioambiente.
Recipientes de Foam
El foam es especialmente utilizado en portavasos, ya que es aislante térmico, por lo que es ideal para transportar bebidas calientes manteniendo su temperatura a la vez que se evita el riesgo de quemaduras.
Recipientes de cartón
Los recipientes de cartón son la opción perfecta para minimizar el impacto medioambiental, ya que se trata de un producto biodegradable y reciclable. Además, permite una fácil personalización de los envases mediante la impresión del logotipo de la marca. Como contrapartida, no guardan el calor.
En conclusión, la elección del envase take-away que quieres utilizar en tu negocio depende de varios factores, incluyendo el tipo de alimentos, las necesidades de tus clientes y los valores de tu negocio. En Zambú contamos con una amplia selección de envases para llevar de distintos materiales y características para poder adaptarnos a tus necesidades. Si te ha quedado alguna duda, contacta con tu Asesor de Higiene Profesional, llámanos al 968 180 767 o escríbenos a hola@zambu.com. ¡Estaremos encantados de ayudarte!